EL PERMISO DE RESIDENCIA LASTRAN A LOS VENEZOLANOS EN ESPAÑA

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La comunidad más numerosa  En España , ante una contradicción: se censan y sus hijos van a clase, pero muchos no pueden trabajar

La comunidad venezolana es cada vez más amplia en Ourense, consolidándose como el primer colectivo de extranjeros no europeos. Sin embargo, este colectivo se enfrenta a cada vez más problemas, no de convivencia, sino de falta de integración laboral, al estar en una especie de "limbo", lastrado por la burocracia, el problema de la homologación de los títulos y la denegación de permisos laborales, que les obliga a trabajar en negro.

Con un nuevo Gobierno a punto de conformarse, los colectivos que luchan por los derechos de los venezolanos son tajantes a la hora de pedir mejoras. "La Ley de Emigración tiene que servir para integrarnos en positivo. Si dejas entrar a la inmigración, hay que usar canales para que puedan trabajar", indica Manuel Pérez, presidente de la Federación de Venezolanos de Galicia (Fevega). 

Modus operandi

 

La mayoría llega con visado de turista y se queda. "Es cierto que no hay persecución migratoria, pero viven en el limbo", dice Pérez. La gente se ve obligada a estar tres años de forma irregular para poder tener permiso de residencia y de trabajo. "Cómo vas a vivir sin papeles si ya nos cuesta vivir a los que los tenemos", se pregunta. 

Muchos optan, dice María Fernanda Ruiz, que asesora en la oficina itinerante, "por pedir la protección y asilo internacional por razones humanitarias. Te dan la tarjeta roja, que dura un año pero no autoriza a trabajar. El problema es cómo te legalizas. Después para que te den la residencia hay que tener trabajo a tiempo completo por un año. Nadie lo consigue. Se necesita un permiso para trabajar, no puede trabajar en negro. No se puede pretender que venga todo el mundo y no dar permiso de trabajo". 

 

Articulo de  La Region Ourense 

Óscar Pinal